Colour-blindness is an inability of certain parts of the retina, called cones, to differentiate pigments — either red from green or blue from yellow, or both. It is more common in males because it is genetic and involves genes found on the X chromosome.
The degree of colour-blindness may vary from very mild to complete. It can be determined using special cards when the child is old enough to co-operate with the test. Fortunately, the disability is usually mild, but can interfere with some career choices, for example, airline pilot. There have been articles about lenses that can help enhance the shading and help differentiate colours. For children, the issue is that some learning materials are colour coded — make sure your son’s teacher is informed about the issue.
Fuente: Today's Parent
Mostrando entradas con la etiqueta colores. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta colores. Mostrar todas las entradas
lunes, 11 de julio de 2011
martes, 8 de febrero de 2011
¿Azul para los niños, rosa para las niñas?
Por: Yolanda Monge
¿Huyes de los estereotipos de género? ¿Decoraste la habitación de tu bebé en azul porque sabías que era un niño? ¿De rosa porque era una niña? ¿De neutro amarillo? ¿O en plan rupturista le colocaste unas polainas rosa palo a tu hijo al nacer aunque a tu tía abuela le fuera a dar un síncope -o precisamente por ello-? ¿Muñecas para las niñas y camiones para los niños? Veamos.
La tradición se impone y es difícil -o incluso no necesaria- de cambiar. En los hospitales de EEUU, la tarjeta que se pega a la cuna del recién nacido es azul si es un niño o rosa si es una niña. El ridículo gorrito que les colocan lleva un lazo azul si es un nene y uno rosa si es una nena. Hace unos días vi en la cadena de televisión abc un experimento que ponía a prueba los prejuicios que tiene la gente respecto a qué juguete es adecuado para cada género.
Captura de pantalla 2011-01-27 a las 3.57.20 PM Un padre entra con su hijo en una juguetería. [Nota: se trataba de una cámara oculta, aunque la cadena luego ofreció a quienes fueron filmados la oportunidad de expresar sus comentarios cuando se les informó de lo que estaba pasando.] El niño inmediatamente se va hacia la estantería en la que están las muñecas y pide a gritos una 'Barbie'. Padre e hijo son actores. Pero el resto de los clientes no.
Las respuestas a la petición del pequeño fueron para todos los gustos, y en general las que expresaron más abiertamente sus pensamientos fueron las mujeres. Los hombres se callaban su opinión y miraban recelosos lo que sucedía.
"Quiero una barbie", insiste el niño. "Absolutamente no", le dice el padre."Adoro las barbies", insiste feliz el infante. "Tienes que estar tomándome el pelo", replica el supuesto padre con gesto de frustración. Una clienta informa al padre 'en apuros' que también existe 'Ken'... Otra no dice nada y sin embargo le entrega una nota en la que se lee: 'William´s Doll', un libro escrito en 1972 por Charlotte Zolotow sobre un niño que quería jugar con muñecas y un padre que se oponía totalmente.
El programa relata que más o menos la gente no tuvo inconveniente en que el niño optara por una muñeca pero que llegaron incluso a escandalizarse ante la posibilidad de que el pequeño quisiera vestirse de princesa. Cheryl Kilodavis, madre de un niño, relata en el libro 'My Princess Boy' los insultos y rechazo que sufrieron al decidir expresar libremente las preferencias de su hijo por el color rosa, las joyas y los vestidos de hada. La madre de un niño de cinco años vio aumentar las entradas en su blog de forma exponencial cuando anunció que a su hijo le apasionaba vestirse como Daphne, un personaje femenino de 'Scooby Doo'. Ahí queda: ¿Azul o rosa? ¿Barbie o Ken? Siempre queda la opción de un Ken rosa y una Barbie azul.
¿Huyes de los estereotipos de género? ¿Decoraste la habitación de tu bebé en azul porque sabías que era un niño? ¿De rosa porque era una niña? ¿De neutro amarillo? ¿O en plan rupturista le colocaste unas polainas rosa palo a tu hijo al nacer aunque a tu tía abuela le fuera a dar un síncope -o precisamente por ello-? ¿Muñecas para las niñas y camiones para los niños? Veamos.
La tradición se impone y es difícil -o incluso no necesaria- de cambiar. En los hospitales de EEUU, la tarjeta que se pega a la cuna del recién nacido es azul si es un niño o rosa si es una niña. El ridículo gorrito que les colocan lleva un lazo azul si es un nene y uno rosa si es una nena. Hace unos días vi en la cadena de televisión abc un experimento que ponía a prueba los prejuicios que tiene la gente respecto a qué juguete es adecuado para cada género.
Captura de pantalla 2011-01-27 a las 3.57.20 PM Un padre entra con su hijo en una juguetería. [Nota: se trataba de una cámara oculta, aunque la cadena luego ofreció a quienes fueron filmados la oportunidad de expresar sus comentarios cuando se les informó de lo que estaba pasando.] El niño inmediatamente se va hacia la estantería en la que están las muñecas y pide a gritos una 'Barbie'. Padre e hijo son actores. Pero el resto de los clientes no.
Las respuestas a la petición del pequeño fueron para todos los gustos, y en general las que expresaron más abiertamente sus pensamientos fueron las mujeres. Los hombres se callaban su opinión y miraban recelosos lo que sucedía.
"Quiero una barbie", insiste el niño. "Absolutamente no", le dice el padre."Adoro las barbies", insiste feliz el infante. "Tienes que estar tomándome el pelo", replica el supuesto padre con gesto de frustración. Una clienta informa al padre 'en apuros' que también existe 'Ken'... Otra no dice nada y sin embargo le entrega una nota en la que se lee: 'William´s Doll', un libro escrito en 1972 por Charlotte Zolotow sobre un niño que quería jugar con muñecas y un padre que se oponía totalmente.
El programa relata que más o menos la gente no tuvo inconveniente en que el niño optara por una muñeca pero que llegaron incluso a escandalizarse ante la posibilidad de que el pequeño quisiera vestirse de princesa. Cheryl Kilodavis, madre de un niño, relata en el libro 'My Princess Boy' los insultos y rechazo que sufrieron al decidir expresar libremente las preferencias de su hijo por el color rosa, las joyas y los vestidos de hada. La madre de un niño de cinco años vio aumentar las entradas en su blog de forma exponencial cuando anunció que a su hijo le apasionaba vestirse como Daphne, un personaje femenino de 'Scooby Doo'. Ahí queda: ¿Azul o rosa? ¿Barbie o Ken? Siempre queda la opción de un Ken rosa y una Barbie azul.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)